Dábale don Juan gusto al sentido
mientras doña Inés piensa a su lado:
valiente cretino tengo por
marido que pudiendo el placer ser compartido,
sólo su copa de vino ha llenado.
Descuida Juan que por tu usura,
como aquel que bebe vino tras la reja
y hasta el final de la vasija apura,
hallarás cumplido pago a tu aventura
y tratado serás como una oveja.