En un entorno absolutamente privilegiado para la elaboración de vinos de calidad como es el Bosque de Matasnos, en las tierras altas del Duero, nace este monovarietal de Syrah como vino de parcela única.
Por tal motivo es un vino que solo se produce los años que la calidad y la climatología lo permite, imponiéndonos en Bosque de Matasnos el riguroso control de calidad de producir este vino solo los años que verdaderamente nos puedan sorprender.
Criado en barricas nuevas de roble francés y maloláctica en roble nuevo americano premium. Uva vendimiada a mano, seleccionada en campo y posteriormente en doble cinta de selección en bodega. Llega hasta ustedes un vino singular, potente en nariz, fino y delicado en boca.